INCENDIOS, EL ENEMIGO...

De los incendios a las cabras del Calvario de Abenfigo.

Salimos de Mas de las Matas, en una tarde en que el calor todavía aprieta....pero es que hemos pasado los días más tóriidos,más calurosos y dramáticos....los incendios nos han abrasado y después de ver los cielos rojos,con sus columnas de humo como si hubiesen chimeneas desperdigadas alrededor del valle del Mas....necesitamos un ambiente un poco húmedo: decidimos marchar hacia el azud de Abenfigo y nos fijamos el objetivo de subir al calvario....si es qu el dios sol nos lo permite.
Necesitamos un cambio, el día antes camino de Las Parras, al pararse en los puntos altos de las cuestas,llagada la hora de formalizar nuestras pulsaciones veías cómo sobresalían las columnas de cenizas y cuando se animaba una ligera brisa las finas partículas de ceniza se venían encima....me acuerdo de un verano trágico en el norte de Castellón y de las llamas que devoraban todo lo que encontraban por delante....me acuerdo del incendio a sólo un kilómetro de mi población(Càlig), con las llamas que evacuaron a visitantes y conciudadadanos....me acuedo de aquel olor impregnado, de la lluvia de cenizas, de los abuelos y abuelas llorando y , sobretodo, de la impotencia y la rabia.
Después de Las Parras, aunque no llegamos.... no por eso la excursión dejó de ser fascinante, nos adentramos por la noche hacia el término de Alcorisa....allí, en el Alto del Caballo(donde las trincheras), se veía "andar" al incendio de Los Olmos y las lucecitas de las dotaciones que iban y venían cómo si fuesen las hormigas trabajando y trasladando desde un encuentro suculento a su cubil hormiguero.....a nuestra espalda otro resplandor, el de la dirección al incendio entre Mazaleón y Valdetormo....resplandor, seguramente, avivada por la tragedia que todavía resalta de Horta de Sant Joan, allá en la Terra Alta de Tarragona.
Dirección Aliaga no atisbamos mucho....pero sabemos que allí el fuego ha devorado tierras, paisajes, entornos realmente bellos y que formaban parte, aunque sólo fuese un poco, de todos.Un nudo fuerte, como ensortijado, en la garganta.

Puede que por eso, al día siguiente, todos tuviesen la idea de airear un poco la mirada con un poco más de verde, sin salirse de las rutas de Mas de las Matas. El azud sofocará el calor o lo apariguará....

La ruta de subida a Abenfigo es entretenida, aunque hayan cortado una chopera(cosa que nos despistó un poco), después la senda se va divisando, poco a poco porque, está claro, que pasa muy poca gente...seguimos...la cascarilla artificial(fruto de la salida de agua intencionada de una pequeña acequia) ahora no encharca nada, pero la pared está húmeda y se notan todavía muchos mosquitos.....el suelo como de barro casi seco....allí las zarzas,casi asustan. Seguimos y divisamos el Guadalope, muy,muy tranquilo....casi parado encauzado.Pronto salimos de la estrecha senda para adentrarnos en un camino, unos pinos, el canal de Aguaviva a nuestra izquierda, unos conglomerados rojos y que se asemejan a un puzzle de pequeñas piedras unidas o pegadas....al fondo la Central Eléctrica que rodeamos. El puente metálico que atravesamos y la cuesta de tierra que subimos hasta encontrarnos con la entrada de una senda que , paralelamente al canal de Mas de las Matas, nos llevará al azud. LLegamos no sin tener que bregar,otra vez, con zarzas y muchas cañas...no sin mojarnos porque los agricultores levantan sus portezuelas para que emane el agua y dar de beber a sus produstos....huele a tierra húmeda y mantenemos una conversación con uno de ellos que agradece nuestro paso porque eso supone levandar el dorso y la mirada de la tierra....nos despedimos y nos anima. Hoy el barranquillo de Seno está seco y a partir de ahí y hacia el azud, silencio porque en más de una se han visto, como relámpagos, a cabras. Nos encontramos con vecinos de Abenfigo que salen a caminar y que relajadamente van tirando de conversación....será casi imposible dar con una cabra que baje a beber.
De vuelta nos adentramos al peblo, ya la noche se afana...pero este pueblo siempre vale una paseada...sus calles, sus gentes, sus plantas de colores, sus cactus, sus gatos tranquilos y reyes de la tierra y sus perros que avisan de personas extrañas....

Cruzamos la carretera y nos disponemos a subir el humilde,pero precioso Calvario...de verdad entrañable.El camino de piedrecitas, el componente que implica a las familias con la reconstrucción, las torretas blancas y que señalan el camino....pero nos hemos pasado un poco la entrada y al darnos cuenta, justo entonces, me doy cuenta que es verdad eso de: "que en todo lo bueno hay algo de malo y en todo lo malo , algo de bueno"...¿por qué?. Estamos ante dos cabras hembras preciosas y tres criaturas de movimientos un poco imprecisos. Están a unos seis metros...Pasaron unos buenos minutos y ellas allí comiendo...ellos comiendo e investigando, más nerviosos...entonces una ramilla se rompe bajo mi pie derecho. Una de las cabras gira, como en contorsión, la cabeza y nos mira...un buen rato. Un sonido extraño, como si carraspease a lo bestia y un silbido...el muchas veces escuchado y que parece llamar la atención de todo el grupo. Se repliegan en un visto y no visto....todavía les vemos saltar como en hípica piedras y matorrales....todavía sentimos un pálpito de libertad...el mismo que sube el ritmo del latido al subir el calvario y el mismo que se detiene cuando por entre las atalayas de Castellote y donde debe estar Seno... se ve , todavía, humo y el cielo rojo....ya no tanto,pero ahí está. Bajamos con atención y siencio....el pueblo de Abenfigo nos vuelve a recibir tranquilo, silencioso, apacible...hay algo mágico en este rincón, perteneciente ya al Maestrazgo.
Sabemos que volveremos con gusto,mucho gusto.